hoy profesor emérito de la Universidad de Leeds. Estudió las estratificaciones sociales y las relacionó con el desarrollo del movimiento obrero.
Después analizó y criticó la modernidad y dio un diagnóstico pesimista de la sociedad. Ya en los 90 teorizó acerca de un modo diferente de enfocar el debate cuestionador sobre la modernidad.
He considerado oportuno dedicar una entrada a comentar este artículo por la diversidad de ideas que se plantean, ideas peculiares y diferentes que plantean hipótesis y creencias en cuanto a la opinión de este señor.
En cuanto al concepto de "modernidad líquida", se define como un tiempo donde las relaciones sociales y económicas
discurren como un fluido que no puede conservar la forma adquirida en cada
momento.
Con este concepto se hace referencia a un nuevo tipo de política de “flotación libre”, notable
por su carácter expeditivo, pero también por su cortoplacismo, reducción a un
único tema, fragilidad y resistencia a la institucionalización.
Zygmunt Bauman habla de la crisis, de este momento crítico en el que nos encontramos, y plantea un nuevo tipo de mundo que, según él, puede surgir a raíz de esta crisis que vivimos.
Bauman opina que las medidas que tomaron y panificaron los gobiernos pueden llevarnos a “recapitalizar” los
bancos y permitirles volver a la “actividad normal”, es decir, a la actividad
que nos condujo a la situación de crisis actual, pagando los intereses de
consumo que el banco inspiró por medio de impuestos pagados al estado.
En este nuevo mundo de "vuelta a la normalidad" significaría una vuelta a las vías malas y siempre peligrosas. Sin embargo, no hay nada seguro, no está sentenciado este destino, todavía estamos a tiempo de reflexionar y cambiar el camino, todavía podemos convertir el shock y la conmoción en algo beneficioso tanto para nosotros como para nuestros hijos.
En su entrevista, Bauman afirma que nos corresponden múltiples culturas pero una única realidad. Con esto se refiere a la situación que vivimos en el siglo XXI, en la que según él,
todos estamos interconectados y a la vez somos interdependientes; Estamos
interconectados porque lo que pasa en un lugar del globo tiene impacto en todos
los demás, pero al mismo tiempo, somos interdependientes, pues esa condición
que compartimos se traduce en miles de lenguas y culturas diferentes.
En este nuevo mundo de "vuelta a la normalidad" significaría una vuelta a las vías malas y siempre peligrosas. Sin embargo, no hay nada seguro, no está sentenciado este destino, todavía estamos a tiempo de reflexionar y cambiar el camino, todavía podemos convertir el shock y la conmoción en algo beneficioso tanto para nosotros como para nuestros hijos.
En su entrevista, Bauman afirma que nos corresponden múltiples culturas pero una única realidad. Con esto se refiere a la situación que vivimos en el siglo XXI, en la que según él,
todos estamos interconectados y a la vez somos interdependientes; Estamos
interconectados porque lo que pasa en un lugar del globo tiene impacto en todos
los demás, pero al mismo tiempo, somos interdependientes, pues esa condición
que compartimos se traduce en miles de lenguas y culturas diferentes.
Esta contrariedad nos hace aprender a vivir con diferencias, conservando
cada uno su identidad y beneficiándonos de las diferencias con los otros. De
alguna manera nuestra supervivencia depende de si cooperamos o luchamos entre
nosotros.
Exponiendo los diferentes problemas y pesadillas que sufre cada tipo de sociedad en una determinada época, Bauman advierte que uno de los miedos y preocupaciones de nuestra sociedad en esta época recae sobre nuestra seguridad personal, puesto que parece que estamos dispuestos a entregar parte de la libertad que tanto les costó conseguir a nuestros abuelos a cambio de mayor seguridad. En relación con esto, la sociedad moderna utiliza todo tipo de estratagemas, en su mayor parte a través de sustitutos, para manejar la falta de seguridad que ella misma produce.
Exponiendo los diferentes problemas y pesadillas que sufre cada tipo de sociedad en una determinada época, Bauman advierte que uno de los miedos y preocupaciones de nuestra sociedad en esta época recae sobre nuestra seguridad personal, puesto que parece que estamos dispuestos a entregar parte de la libertad que tanto les costó conseguir a nuestros abuelos a cambio de mayor seguridad. En relación con esto, la sociedad moderna utiliza todo tipo de estratagemas, en su mayor parte a través de sustitutos, para manejar la falta de seguridad que ella misma produce.
Uno de los más
habituales es el desplazamiento del terror a la globalización inaccesible,
caótica, descontrolada impredecible a sus productos: inmigrantes, refugiados,
personas que piden asilo. Otro instrumento es el que proporcionan las llamadas
“comunidades cerradas” fortificadas contra extraños, merodeadores y mendigos.
En líneas más
generales: las estratagemas más extendidas se reducen a la sustitución de
preocupaciones sobre la seguridad del cuerpo y la propiedad por preocupaciones
sobre la seguridad individual y colectiva sustentada o negada en términos
sociales.
"La crisis consiste precisamente en el hecho de que lo viejo está muriendo y lo nuevo no puede nacer"
Concluiría con esta frase que dice Bauman según la cual podemos entender que hemos llegado a esta situación de crisis por dos motivos; por un lado, las bases sobre las que se establece la soberanía y el poder actual están decayendo, están seriamente dañadas e incluso divididas en dos; poder y política, y por otro, no acaba de aparecer un sistema que corrija los errores del anterior, un sistema aceptado por todos que sacie las necesidades de la sociedad.
Recomiendo este vídeo en el que se explica de manera clara, breve y directa en qué consiste y cómo nos afecta lo que conocemos como "modernidad líquida".
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